¿Qué es la encefalitis?
Cuando las infecciones o las afecciones médicas subyacentes que afectan el cerebro y la médula espinal activan el sistema inmunitario, esto puede provocar inflamación (en inglés). La inflamación en sí misma puede provocar una amplia gama de síntomas y, en casos extremos, puede resultar en daño cerebral, accidente cerebrovascular o incluso la muerte.
La inflamación del cerebro se denomina encefalitis.
Síntomas de encefalitis
Las personas con encefalitis suelen presentar síntomas leves similares a los de la gripe, como fiebre, fatiga, dolor de cabeza o dolores corporales. No obstante, muchas personas no presentan ningún síntoma cuando tienen encefalitis. En otros casos, las personas pueden experimentar:
- Problemas del habla o de la audición
- Visión doble o pérdida de la visión
- Fiebre alta y/o repentina
- Alucinaciones
- Cambios de personalidad o conducta
- Pérdida del conocimiento
- Pérdida de sensibilidad en algunas partes del cuerpo
- Alteraciones en el pensamiento
- Rigidez (en inglés) en el cuello
- Alteraciones en la función motora, incluidos movimientos espasmódicos incontrolables de la cabeza, el tronco o las extremidades (llamados espasmos mioclónicos)
- Parálisis parcial en brazos y piernas
- Alteración del juicio
- Temblores (en inglés)
- Convulsiones
- Pérdida de la memoria
- Coma
La encefalitis puede ser peligrosa en los bebés. Preste atención ante la presencia de fiebre, letargo (debilidad o somnolencia), alimentación inadecuada, vómitos, rigidez corporal, irritabilidad o llanto inexplicables/inusuales y la fontanela (el punto blando en la parte superior de la cabeza) tensa o abultada.
Debido a que las personas pueden tener síntomas sutiles de encefalitis, es posible que muchos casos no sean diagnosticados. Se informan varios miles de casos cada año, pero pueden ocurrir muchos más, ya que los síntomas pueden ser leves al inicio en algunas personas.
¿Quién tiene más probabilidades de desarrollar encefalitis?
Cualquier persona de cualquier edad puede tener encefalitis. Las personas con el sistema inmunitario debilitado, incluidas las personas que viven con VIH o que toman fármacos inmunosupresores, tienen un mayor riesgo.
Algunas formas de encefalitis son contagiosas y pueden propagarse a través del contacto con:
- Saliva
- Secreción nasal
- Heces
- Secreciones de las vías respiratorias y la garganta (a menudo se propagan al besar, toser o compartir vasos, cubiertos, cepillos de dientes o lápices de labios)
Por ejemplo, las personas que comparten un hogar, un centro de guardería o un aula con una persona infectada pueden infectarse.
Debido a que la enfermedad puede ocurrir de repente y progresar rápidamente, cualquier persona con sospecha de tener encefalitis debe comunicarse de inmediato con un médico o ir al hospital.
Causas de encefalitis
La inflamación del cerebro y de la médula espinal puede ser causada por infecciones como los virus. La encefalitis también puede ser autoinmune, cuando los anticuerpos pueden atacar las células cerebrales. La encefalitis infecciosa es causada por una infección que invade el cerebro o por la reactivación de una infección previa que daña el cerebro. La encefalitis también puede surgir cuando un virus o una vacuna desencadenan una reacción que hace que el sistema inmunitario ataque por error al tejido cerebral sano. Esto se denomina encefalitis autoinmune. La encefalitis autoinmune también puede ser desencadenada por tumores o ser primaria. Si bien esto es raro, ha habido casos de encefalitis autoinmune postinfecciosa (cuando es desencadenada por una respuesta inicial a un agente infeccioso).
Encefalitis infecciosa
Las causas infecciosas de la encefalitis incluyen bacterias, virus, hongos y parásitos. Para algunas personas, la exposición ambiental (como un parásito), los viajes recientes o un estado inmunocomprometido (como VIH, diabetes, esteroides o tratamiento con quimioterapia) son factores de riesgo importantes.
La mayoría de los casos diagnosticados en los EE. UU. son causados por:
- Virus del herpes simple tipos 1 y 2.
- Arbovirus (como el virus del Nilo Occidental), que se transmiten de animales infectados a seres humanos a través de la picadura de una garrapata, mosquito u otro insecto chupador de sangre infectado.
- Enterovirus, un tipo de virus muy común que, en su mayoría, causa una enfermedad leve o infección respiratoria y, por lo general, ocurre en verano y en otoño.
Algunos tipos de encefalitis incluyen:
Encefalomielitis diseminada aguda
La encefalomielitis diseminada aguda (EMDA) provoca un ataque de inflamación en el cerebro y la médula espinal que daña la mielina (en inglés). La mielina es el recubrimiento protector sobre los nervios que ayuda con la señalización nerviosa eléctrica. La EMDA generalmente aparece después de una infección viral o bacteriana. En casos muy raros, la EMDA puede aparecer después de una vacunación. Una causa frecuente de la EMDA es el anticuerpo de oligodendrocitos de mielina (OGM). A veces se diagnostica erróneamente como el primer ataque grave de esclerosis múltiple (en inglés), ya que los síntomas y el daño a la sustancia blanca pueden ser similares. La EMDA puede afectar a cualquier persona, pero afecta principalmente a los niños pequeños. El tratamiento está dirigido a suprimir el sistema inmunitario y reducir la inflamación mediante el uso de fármacos antiinflamatorios como los corticosteroides. Algunas personas pueden necesitar intercambio de plasma (en inglés) (plasmaféresis) o terapia con inmunoglobulinas (en inglés). La mayoría de las personas con EMDA comienzan a recuperarse en el plazo de días después del tratamiento, y muchas se recuperarán por completo en el plazo de seis meses. En raras ocasiones, la EMDA puede ser mortal.
Encefalitis letárgica
La encefalitis letárgica es una enfermedad rara sin causa conocida, pero los investigadores sospechan que puede provenir de un virus. Hubo una pandemia de encefalitis letárgica (conocida como “enfermedad del sueño”) de alrededor de 1916 a 1930, pero no se ha informado recurrencia de la epidemia desde entonces. En algunos casos de encefalitis letárgica, las personas desarrollaron enfermedad de Parkinson (en inglés) después de la recuperación, a veces hasta un año después de la enfermedad. La levodopa y otros fármacos para tratar la enfermedad de Parkinson se pueden utilizar para tratar la encefalitis letárgica, según los síntomas de la persona. La progresión de la enfermedad varía según las complicaciones u otros trastornos que pueda tener la persona.
Encefalitis por herpes simple
La encefalitis por herpes simple (EHS) es responsable de aproximadamente el 10 % de todos los casos de encefalitis. Más de la mitad de los casos no tratados son mortales. La mayoría de los casos son causados por la reactivación de una infección anterior por el virus del herpes simple, pero algunos casos resultan de la infección inicial. La mayoría de las personas contraen el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1, la causa de herpes labial o ampollas febriles) en la infancia.
Los casos de encefalitis debido al VHS-1 pueden afectar a cualquier grupo etario, pero se observan con mayor frecuencia en personas menores de 20 años o mayores de 40 años. Esta enfermedad de progresión rápida es la causa más importante de encefalitis mortal. Los síntomas incluyen dolor de cabeza y fiebre durante un máximo de cinco días, seguidos de cambios en la personalidad y el comportamiento, convulsiones, alucinaciones y alteración del nivel de conciencia. El daño cerebral en adultos y niños generalmente se observa en los lóbulos frontales (que conduce a cambios conductuales y de personalidad) y en los lóbulos temporales (que conducen a problemas de memoria y del habla) y puede ser grave.
El virus del herpes simple tipo 2 (VHS-2, herpes genital) se transmite con mayor frecuencia a través del contacto sexual. Muchas personas no saben que están infectadas y es posible que no tengan lesiones genitales activas. Una madre infectada puede transmitir VHS-2 a su hijo al nacer, a través del contacto con secreciones genitales. En los recién nacidos, los síntomas de EHS, como letargo, irritabilidad, temblores, convulsiones y alimentación deficiente, generalmente se desarrollan entre cuatro y 11 días después del parto.
Encefalitis infecciosa transmitida por mosquitos
En los Estados Unidos se observan cinco formas frecuentes de encefalitis viral transmitida por mosquitos:
- La encefalitis equina afecta tanto a los caballos como a los seres humanos.
- La encefalitis equina oriental (en inglés) ocurre principalmente en los EE. UU. oriental, y se observan algunos casos en la región de los Grandes Lagos. Solo se observan unos pocos casos anualmente en los Estados Unidos. Afecta principalmente a niños pequeños y adultos mayores de 55 años. Los síntomas se observan dentro de los cuatro días o hasta dos semanas posteriores a la transmisión a través de la picadura de un mosquito infectado e incluyen fiebre repentina, dolores musculares similares a los de la gripe general y dolor de cabeza de mayor gravedad, seguido de coma y muerte en casos graves.
- La encefalitis equina occidental (en inglés) se observa en las áreas de agricultura en los estados de las llanuras occidentales y centrales. Los síntomas comienzan dentro de los cinco a 10 días después de la infección. Los niños, particularmente los menores de un año, se ven afectados con mayor gravedad que los adultos y pueden tener daño neurológico permanente.
- La encefalitis de La Crosse (en inglés) generalmente ocurre en los estados del medio oeste superior, pero también se ha informado en las regiones del sureste y Atlántico medio de los EE. UU. La mayoría de los casos afectan a niños menores de 16 años. Los síntomas, como vómitos, dolor de cabeza, fiebre y letargo, aparecen hasta 10 días después de la infección. Las complicaciones graves incluyen convulsiones, coma y daño cerebral permanente. Cada año, se informan aproximadamente 100 casos de encefalitis de La Crosse.
- La encefalitis de San Luis (en inglés) se produce con mayor frecuencia en las regiones templadas de los EE. UU. La enfermedad generalmente es más leve en niños que en adultos, con adultos mayores con el mayor riesgo de enfermedad grave o muerte. Los síntomas generalmente aparecen en el plazo de siete a 10 días después de la infección e incluyen dolor de cabeza y fiebre. En casos más graves, pueden ocurrir confusión y desorientación, temblores, convulsiones (especialmente en los muy jóvenes) y coma.
- La encefalitis del Nilo Occidental (en inglés) generalmente se transmite por una picadura de un mosquito infectado, pero también puede ocurrir después del trasplante de un órgano infectado o de transfusiones de sangre o productos sanguíneos infectados. Los síntomas son similares a los de la gripe e incluyen fiebre, dolor de cabeza y dolor articular. Algunas personas pueden desarrollar una erupción cutánea y glándulas linfáticas inflamadas, mientras que otras pueden no presentar síntomas. Los adultos mayores y las personas con sistemas inmunitarios debilitados tienen el mayor riesgo de presentar síntomas graves.
Otras causas de encefalitis, incluido el virus del Zika (en inglés), la encefalitis japonesa (en inglés) y la encefalitis equina venezolana, afectan a personas en otras partes del mundo. Hable con su proveedor de atención médica sobre los posibles riesgos si viaja fuera de los EE. UU
Encefalitis transmitida por garrapatas
Algunos tipos de encefalitis se propagan mediante garrapatas, incluidas la encefalitis transmitida por garrapatas (virus de la ETG) (en inglés)y el virus de Powassan (en inglés).
Panencefalitis esclerosante subaguda
La panencefalitis esclerosante subaguda (PEES) es una infección viral lenta y persistente que afecta el sistema nervioso central (SNC). La PEES está relacionada con el sarampión y se considera una enfermedad rara en los países donde la vacunación contra el sarampión está disponible y se usa ampliamente. La PEES afecta a niños y adultos jóvenes. La mayoría de los niños con PEES tienen antecedentes de infección por sarampión a una edad temprana, generalmente menor de 2 años, seguido de un período latente (sin síntomas) de seis a ocho años antes de que comiencen los síntomas neurológicos. Algunos niños tuvieron infección asintomática por sarampión antes de la edad de la primera vacunación. Actualmente, no hay cura para la PEES; sin embargo, la vacunación contra el sarampión puede ayudar a prevenirlo. En las etapas avanzadas de la PEES, las personas pueden perder la capacidad de caminar a medida que sus músculos se endurecen o espasmo. Las personas que padecen la enfermedad se deteriorarán físicamente hasta que caigan en coma y luego en un estado vegetativo persistente. Las personas con PEES generalmente mueren por fiebre, insuficiencia cardíaca o cuando el cerebro ya no puede controlar el sistema nervioso autónomo. En casos poco frecuentes, las personas con PEES pueden tener una forma crónica, de progresión lenta, algunas con recaídas y remisiones.
Encefalitis autoinmune
La encefalitis autoinmunitaria se refiere a un grupo de afecciones que ocurren cuando el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error las células cerebrales sanas, lo que provoca inflamación del cerebro. Algunos casos de encefalitis autoinmunitaria son causados por ciertos medicamentos o un trastorno autoinmunitario o reumatológico que, en algunos casos, puede ser desencadenado por una respuesta inicial a una infección (posinfecciosa), como encefalitis por anticuerpos contra el receptor NMDA posherpética o encefalitis de receptores anti-NMDA, o por un cáncer, incluso uno que sea microscópico y no pueda encontrarse (denominado síndrome neurológico paraneoplásico). Algunos tipos de encefalitis autoinmunitaria incluyen:
Encefalitis por el COVID-19
Aunque es rara, algunas personas con COVID-19 desarrollan lo que parece ser encefalitis, que es causada por el virus SARS-CoV2 que ingresa y afecta el cerebro o puede ser una reacción autoinmunitaria a la infección por el virus. Obtenga más información sobre el sistema nervioso y la COVID-19 (en inglés).
Encefalitis límbica
La encefalitis límbica causa inflamación del sistema límbico (las partes del cerebro que controlan sus emociones, comportamiento, motivación y memoria) y otras partes del cerebro. Los síntomas de encefalitis límbica incluyen confusión, pérdida de la memoria, alteraciones del sueño, síntomas psiquiátricos (perfil o comportamiento alterado) y convulsiones. En muchos casos, ocurre cuando el sistema inmunitario tiene una reacción a un tumor canceroso conocido como neoplasia y puede atacar el cerebro. Esto se denomina encefalitis límbica paraneoplásica. Encefalitis límbica no paraneoplásica es el término de encefalitis límbica sin neoplasia. Los estudios de diagnóstico por imágenes, los análisis de laboratorio y la EEG (electroencefalografía), que mide la actividad eléctrica del cerebro, pueden diagnosticar encefalitis límbica. El tratamiento implica medicamentos para evitar que el sistema inmunitario ataque a células y tejidos sanos por error (inmunosupresores), incluidos corticosteroides, inmunoglobulinas (un producto sanguíneo administrado a través de la vena) e intercambio de plasma (una máquina separa el plasma (la parte líquida de la sangre) de las células sanguíneas. El rituximab es un medicamento inmunitario reciente que se dirige a las células del cuerpo que producen anticuerpos.
Encefalitis por anticuerpos contra el receptor de NMDA
La encefalitis de anticuerpos contra el receptor de NMDA o la encefalitis de receptores anti-NMDA se produce cuando el sistema inmunitario produce anticuerpos que atacan por error las proteínas en la superficie de las células nerviosas llamadas receptores de NMDA (N-metil-D-aspartato). Los anticuerpos, también llamados inmunoglobulinas (en inglés), son proteínas que identifican y ayudan a eliminar virus y bacterias. Este tipo de encefalitis se ha vuelto más frecuente. A veces se desarrolla después de la encefalitis debido al virus del herpes simple o a un tumor no canceroso que se cree que estimula la producción de anticuerpos contra el receptor NMDA. La encefalitis por el receptor NMDA afecta principalmente a niños y adultos jóvenes, y a más mujeres que hombres. Los síntomas incluyen convulsiones, confusión y pérdida de la memoria, así como síntomas psiquiátricos como alucinaciones, agitación y cambios en el estado de ánimo. Alrededor de 10 a 20 días después, las personas afectadas pueden desarrollar un trastorno del movimiento con retorcimiento y torsión del rostro, los brazos y las piernas, y experimentar cambios en la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la temperatura, y perder la conciencia. Los médicos pueden realizar una prueba de anticuerpos contra el receptor NMDA en la sangre y el líquido cefalorraquídeo para diagnosticar la afección. El tratamiento implica medicamentos para evitar que su sistema inmunitario ataque a células y tejidos sanos por error (inmunosupresores) y/o la extirpación del tumor (si está presente).
Encefalitis de Rasmussen
La encefalitis de Rasmussen (ER) es una enfermedad neurológica inflamatoria crónica muy rara que por lo general afecta solo un hemisferio (la mitad) del cerebro. Afecta principalmente a niños menores de 10 años, pero también puede afectar a adolescentes y adultos. El ER tiene características de una enfermedad autoinmunitaria en la que las células del sistema inmunitario ingresan al cerebro y provocan daño. Los niños con ER ingresan con frecuencia en una fase de déficits neurológicos permanentes, pero estables, después de ocho a 12 meses. En adolescentes y adultos, la enfermedad puede continuar progresando lentamente a lo largo de la vida de la persona. Se pueden recetar fármacos antiepilépticos, pero es posible que no controlen por completo las convulsiones. Estudios recientes han demostrado cierto éxito con inmunosupresores, en particular, corticosteroides, inmunoglobulina intravenosa (en inglés) y tacrolimus. Se puede recomendar la cirugía para controlar las convulsiones, especialmente en niños en los que el potencial de recuperación es alto. En algunos niños, la cirugía puede detener la progresión de la enfermedad y estabilizar las convulsiones. Sin embargo, la mayoría de las personas con ER quedan con cierta parálisis, déficits cognitivos y problemas del habla. En algunos casos muy poco frecuentes, la enfermedad puede progresar hacia el hemisferio cerebral opuesto.
¿Cómo se diagnostica y trata la encefalitis?
Prevención de la encefalitis
Existen varias formas de prevenir la encefalitis causada por virus e infecciones. Estas son buenas prácticas para prevenir la propagación de diversas enfermedades. Evite compartir alimentos, utensilios, vasos y otros objetos con alguien que pueda estar expuesto o que tenga una infección. Lávese las manos con frecuencia con jabón y enjuague con agua corriente.
Para reducir el riesgo de ser picado por un mosquito o una garrapata infectada, limite las actividades al aire libre por la noche, use ropa de manga larga cuando esté al aire libre, use repelentes de insectos que sean más eficaces para su región, y despeje el césped y las áreas al aire libre de fuentes de agua estancada (donde se reproducen los mosquitos). Tenga cuidado de no usar demasiado repelente de insectos, especialmente en niños pequeños y bebés, ya que las sustancias químicas como la N,N-dietil-meta-toluamida (DEET) pueden absorberse a través de la piel.
Los niños y adultos deben recibir vacunas de rutina contra los virus que pueden causar encefalitis, como sarampión, paperas, poliomielitis, rabia, rubéola y varicela. Las personas que viajan a lugares como algunas partes de Asia, donde pueden encontrarse la encefalitis japonesa (en inglés) y la transmitida por garrapatas (en inglés), deben recibir vacunas específicas. Para prevenir la encefalitis causada por el virus de la rabia, evite el contacto con animales silvestres y vacune a las mascotas.
Diagnóstico de encefalitis
Para diagnosticar la encefalitis, el proveedor de atención médica realiza un examen físico y de antecedentes médicos para revisar las actividades de los últimos días o semanas. Este puede preguntar sobre la exposición reciente a insectos, garrapatas o animales, cualquier contacto con personas enfermas o viajes recientes, afecciones médicas preexistentes y medicamentos. Según los hallazgos del examen físico o los antecedentes médicos, el proveedor de atención médica puede solicitar pruebas de diagnóstico para confirmar la presencia de infección o inflamación. El diagnóstico temprano es vital, ya que los síntomas pueden aparecer repentinamente y alcanzar el daño cerebral, la pérdida de la audición y/o del habla, ceguera o incluso la muerte.
Las pruebas de diagnóstico incluyen:
- Un examen neurológico, que implica una serie de pruebas de examen físico diseñadas para evaluar la función motora y sensorial, la función nerviosa, la audición y el habla, la visión, la coordinación y el equilibrio, el estado mental y los cambios en el estado de ánimo o la conducta.
- Análisis de laboratorio de sangre y líquido cefalorraquídeo, que pueden ayudar a detectar e identificar infecciones en el cerebro y/o la médula espinal y determinar la presencia de autoanticuerpos. Dichas pruebas también pueden descartar afecciones metabólicas que pueden tener síntomas similares.
Análisis del líquido cefalorraquídeo (en inglés) que rodea y protege el cerebro y la médula espinal, que puede ayudar a detectar infecciones en el cerebro y/o la médula espinal, inflamación aguda y crónica, así como otras enfermedades. Se extrae una pequeña cantidad de líquido cefalorraquídeo mediante una aguja especial que se inserta en la parte inferior de la espalda (punción lumbar) y se analiza el líquido para detectar la presencia de bacterias, sangre y virus.
Las imágenes del cerebro pueden revelar signos de inflamación cerebral, sangrado interno u otras anomalías cerebrales. También puede ayudar a los médicos a descartar otros trastornos que pueden causar síntomas similares, como un accidente cerebrovascular (en inglés) o un tumor cerebral (en inglés). La tomografía computarizada (computerized tomography, CT) y las imágenes por resonancia magnética (magnetic resonance imaging, MRI) (en inglés)se usan de forma rutinaria para diagnosticar encefalitis.
Además, el electroencefalograma (EEG) puede identificar ondas cerebrales anormales mediante el monitoreo de la actividad eléctrica en el cerebro.
Tratamiento de la encefalitis
El tratamiento de la encefalitis incluye fármacos antivirales, antibióticos, corticosteroides y otros fármacos, según la causa. Para los tipos graves de encefalitis que para los que no existe una vacuna o un medicamento, el tratamiento de apoyo (reposo, nutrición y líquidos) puede ayudar al cuerpo a combatir la infección y aliviar los síntomas.
Las personas con síntomas de encefalitis deben solicitar un tratamiento médico inmediato y agresivo a un proveedor de atención médica.
Los fármacos antivirales como aciclovir y ganciclovir pueden tratar la encefalitis infecciosa causada por un virus. Sin embargo, no existen tratamientos específicos disponibles para la mayoría de los virus que causan encefalitis. Los antibióticos pueden tratar la encefalitis infecciosa causada por bacterias.
Los fármacos inmunosupresores y la detección de tumores subyacentes, cuando corresponda, pueden ayudar a tratar la encefalitis autoinmune. La encefalomielitis diseminada aguda se trata con esteroides e inmunoglobulina intravenosa (IgIV).
Los medicamentos también pueden ayudar a tratar algunos síntomas de la encefalitis. Los anticonvulsivos pueden detener o prevenir las convulsiones. Los corticosteroides pueden reducir la hinchazón del cerebro. Si una persona está irritable o inquieta, se le puede recetar un sedante. O bien la persona puede tomar acetaminofeno para aliviar la fiebre o el dolor de cabeza. Las personas que tienen dificultad para respirar pueden necesitar respiración artificial.
Una vez que la enfermedad aguda, que normalmente dura de 1 a 2 semanas, está bajo control, la rehabilitación integral debe incluir rehabilitación cognitiva y fisioterapia, y terapia del habla y ocupacional si la función cerebral se ve gravemente afectada.
El enfoque para las personas con encefalitis generalmente depende del tipo de encefalitis, la gravedad de la enfermedad y la rapidez con la que la persona recibe tratamiento. En la mayoría de los casos, las personas con encefalitis muy leve que no dura mucho tiempo pueden recuperarse por completo, aunque el proceso puede ser lento y llevar varios meses, y los problemas cognitivos pueden persistir.
En casos más graves, la enfermedad puede causar pérdida de la audición y/o del habla, ceguera, daño cerebral y nervioso permanente, cambios conductuales, discapacidades cognitivas, falta de control muscular, convulsiones, pérdida de la memoria o muerte. Las personas con casos graves de encefalitis pueden necesitar terapia a largo plazo, medicamentos y tratamiento de apoyo.
¿Cuáles son las últimas actualizaciones sobre la encefalitis?
El Instituto Nacional de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares (National Institute of Neurological Disorders and Stroke, NINDS), un componente de los Institutos Nacionales de Salud (National Institutes of Health, NIH), el principal patrocinador de la investigación biomédica mundial, es la principal agencia de financiación federal para el tratamiento de la encefalitis y otros trastornos neurológicos. Como parte de su misión, el NINDS lleva a cabo y financia investigaciones sobre encefalitis y otros trastornos relacionados que afectan el cerebro y el sistema nervioso.
La encefalitis por anticuerpos contra el receptor de NMDA es una de las causas más frecuentes de encefalitis autoinmune. Los investigadores respaldados por el NINDS están estudiando el inebilizumab, un prometedor anticuerpo monoclonal terapéutico para el tratamiento de la encefalitis por anticuerpos contra el receptor de NMDA para obtener mejores resultados a largo plazo en este trastorno, determinar criterios de valoración cognitivos más significativos e identificar mejores biomarcadores biológicos para predecir el resultado. Los resultados del ensayo podrían afectar de inmediato la atención del paciente y facilitar el diseño y la implementación de futuros ensayos clínicos en personas con encefalitis autoinmune.
La encefalitis límbica inmunomediada puede provocar epilepsia. Las investigaciones previas han enfatizado las causas paraneoplásicas, en las que la respuesta inmune del cuerpo a un tumor reacciona de forma cruzada con las proteínas normalmente expresadas en el cerebro, que luego se convierten en el objetivo de un ataque autoinmune. No obstante, los informes de casos recientes están generando conciencia sobre encefalitis límbica y las convulsiones autoinmunes no paraneoplásicas.
La ubicación de las neuronas nasales y su exposición al ambiente exterior las hacen un objetivo fácil para las infecciones por virus transportados por el aire, aunque las infecciones respiratorias virales rara vez logran llegar desde el bulbo olfativo hasta el resto del cerebro, donde podrían causar una encefalitis potencialmente mortal. Mediante microscopía de fluorescencia, los investigadores del NINDS descubrieron que una infección viral que comenzó en la nariz se detuvo justo antes de que pudiera propagarse del bulbo olfativo al resto del sistema nervioso central. Mostraron que las células T CD8, que son parte del sistema inmunitario responsable de controlar los virus, pueden actuar como un mecanismo de defensa de primera línea en la protección del cerebro después de una infección del tejido nasal. Las pruebas adicionales mostraron que las microglías, las células inmunitarias dentro del sistema nervioso central, desempeñan un papel subestimado para ayudar al sistema inmunitario a reconocer el virus, ya que esto limitó el daño a las neuronas en sí.
El NINDS, junto con otros institutos y centros, promueve la investigación sobre la encefalomielitis miálgica/síndrome de fatiga crónica (EM/SFC) a través del apoyo para los centros de investigación colaborativa que trabajan de manera independiente y colaborativa para definir las causas y desarrollar tratamientos mejorados para la EM/SFC. El Estudio Intramural sobre el EM/SFC de los NIH (NIH Intramural Study on ME/CFS) (en inglés), un estudio intensivo en una pequeña cantidad de personas con EM/SFC postinfecciosa (EM/SFC-PI), reveló una serie de cambios biológicos en personas con la afección que justifican una mayor exploración en cohortes más grandes y variadas. Un grupo de trabajo del Consejo Nacional Asesor de Trastornos Neurológicos y Accidentes Cerebrovasculares (National Advisory Neurological Disorders and Stroke, NANDS) (en inglés) desarrolló un Mapa de ruta para la investigación de la EM/SFC (en inglés) para guiar la investigación de la EM/SFC y lograr comprender y tratar mejor el trastorno. Luego, el Grupo de Trabajo sobre la EM/SFC Trans-NIH (Trans-NIH ME/CFS Working Group) (en inglés), con representantes de los institutos, centros y oficinas de los NIH, revisará el mapa de ruta e identificará la mejor manera de implementar la investigación para avanzar con las sugerencias.
Se puede encontrar más información sobre la investigación de la encefalitis respaldada por el NINDS y otros institutos y centros de los NIH usando NIH RePORTER (en inglés), una base de datos de búsqueda de proyectos de investigación actuales y pasados respaldados por los NIH y otros organismos federales. La base de datos RePORTER también incluye enlaces a publicaciones y recursos de estos proyectos.
¿Cómo podemos un ser querido o yo ayudar a mejorar la atención de las personas con encefalitis?
Considere participar en un ensayo clínico para que los médicos y científicos puedan obtener más información sobre la encefalitis y los trastornos relacionados. La investigación clínica con participantes humanos en estudios ayuda a los investigadores a obtener más información sobre un trastorno y quizás encontrar mejores maneras de detectar, tratar o prevenir enfermedades de manera segura.
Todos los tipos de participantes son necesarios, los que están sanos o pueden tener una enfermedad, de todas las diferentes edades, sexos, razas y orígenes étnicos para garantizar que los resultados del estudio se apliquen a tantas personas como sea posible, y que los tratamientos sean seguros y eficaces para todas las personas que los utilizarán.
Para obtener información sobre la participación en la investigación clínica, visite NIH Clinical Research Trials and You (en inglés). Puede obtener información sobre los ensayos clínicos que actualmente buscan personas con encefalitis en Clinicaltrials.gov (en inglés).
¿Dónde puedo encontrar más información sobre la encefalitis?
Puede encontrar información disponible de los siguientes recursos: